
A ver, después de tanto tiempo conviviendo juntas ¿qué nos pasa ahora?
todo son enganchones entre ellas y peleas…
Como sus propietarios no quieren que se hagan daño, hemos hecho un informe etológico «in situ» para estudiar el problema conductual: porqué se produce y en qué situaciones.
Una vez sabido ésto, ya podemos trabajar en ponerle remedio con unas pautas sencillas de seguir y una rutina constante, muy dinámica y que sea, sobretodo, tranquila para las dos perras.
*Spoiler: Lo primero, fuera collares…